Mi papichulo maduro (mi primera chupada gay).

Pues tenía yo sólo 14 añitos cuando ya llevaba dos pajeándome y mirando el porno que le robaba a los mayores, aquellos en VHS que les pasaban grabados del CANAL+, soñando con las enormes pollas que salían en las cintas, con las enormes corridas que se tragaban aquellas tetonas USA y más salida que el canto de un edificio.

Y entre eso y las llamaditas a escondidas del Party Line en las que siempre podías conectar con algún viejo baboso (más rico) que te ponía el culo a flor de piel, andaba la nena loca por tener algo ya.

Pero en aquellos entonces, muy pocos, por no decir casi nadie, podían disfrutar de una PC, y ni mucho menos de Internet.
Así que la nena encontró algo que le podría ayudar a encontrar lo que buscaba:
En una sección del periódico Segundamano, en contactos "Chico busca Chico" decía:

"Hombre maduro solo busca chico jovencito para sexo real, abtenerse curiosos".

Mi xoxita anal se puso loca fantaseando con conocer a un hombre maduro por primera vez, imaginando como en las escenas porno de las pelis, con recibir el semen en la boca, de un tío vicioso madurete.

Muy tímida era en aquellos tiempos, pero al fin pudo más el impulso sexual que me atraía a ese número de teléfono. Así que llamé, pero no me atrevía a contestar. El hombre colgó y volví a llamar. En esa ocasión solté un tímido "hola"...

Comenzamos a hablar. El hombre estaba como una moto conmigo, cuando le dije que nunca había estado con nadie. Después de masturbarnos los dos por teléfono, el me dio su dirección que apunté en un papel pequeño y guardé en la mochila del instituto, bien escondido.

Estaba bien retirado el sitio así que tuve que decir en casa que me quedaba a comer con un "amigo" (y no mentía).
Al salir del instituto llamé desde una cabina al hombre y el me esperaba ya (con ánsia).

El me recibió en calzones. Era un hombre de unos casi 60 años, gordito y peludo, canoso...
Noss sentamos en su salón, tenía en el vídeo una peli gay puesta...
El no paraba de mirarme y yo estaba supercortada y nerviosa. Se acercó babeante de vicio y me comió la boca sobándome. Parecía que le iba a dar algo de la excitación. Me empezó a desnudar hasta dejarme desnuda, con la pollita al aire...se levantó y me acercó su prepucio flácido a mi boca. Fue la primera vez que una polla se metía en mi.

Sentí por primera vez un jugo viril que no era el mío. Su sabor era intenso y ágrio, me babeaba y enfangaba toda la boca su líquido preseminal. El hombre me metía y saca su polla que noe ra muy grande, pero iba creciendo con el contacto de mis carrillos, paladar y lengua y, todo loco de excitación, no pudo evitarlo, al poco tiempo eyaculó en mi boca. Mucha cantidad, me caían lso hilos de semen por la barbilla, mi garganta llevaba semen, mi boca llena ufff. La primera pero una de las más abundantes, ricas y jugosas que he recibido.

El hombre me besó la boca lengueteando bien mis carrillos llenos de semen.
"Eres una preciosidad", me dijo.

Y así comenzó mi historia de sexo gay, a los 14 con un papi chulo que me reventó la boca de virilidad haciéndome sentir muy mujer ya...
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