Mi primer encuentro muy especial
Llevaba ya varios años vistiéndome de mujer y me sentía muy feliz, pero con la llegada del internet las cosas cambiaron. Finalmente decidí poner mis mejores fotos y crear un perfil dentro de yahoo. Como siempre suele suceder, recibí mensajes de varios chicos, hasta que uno llamó pronto mi atención.
Después de un breve intercambio de mensajes, acordamos finalmente conocernos y quedamos de vernos en un hotel de la ciudad de México. Yo llegué en forma anticipada a la cita para bañarme, terminar de depilarme y maquillarme para tan especial ocasión. Me puse un bra negro, bikini semitransparente también negro y medias con banda de silicón color negro, como complemento una falda corta entallada color chedrón y una blusa con brillos en varios colores. Desde luego no podían faltar un rico perfume y mis uñas.
Recibí una llamada donde me decía que lo esperara pues estaba un poco retrasado, en fin, me llama pafra preguntar el número de cuarto y le esperé, estaba algo nerviosa. Finalmte cuando tocó y le abrí, fue una sorpresa agradable para ambos.
Les diré que él no era precisamente un galán de cine, pero si muy varonil. Me abrazó y comenzó a besarme muy rico, mientras sus manos acariciaban mis nalgas y mmis piernas. Estando pegada a él sentía como su pene iba creciendo con la excitación.
Con tan ricos besos, el desabroché el cinto para liberar ese suculunto manjar, el cual comencé a mamar, sentía el calor de su pene y su dureza, aumentando con ello una exitación muy grande deseando ser poseida.
Me levantó la falda y me quitó el bikini, se puso detrás de mi tallando du pene entre mis nalgas, la verdad eso me calentó mucho, más adelante, le puse el condón y lubriqué muy bien mi culo. Él me puso en cuatro a la orilla de la cama y me penetró en una forma muy deliciosa y delicada, ya estando toda adentro comenzó a moverse disfrutando de mi culito y poniéndome en un extasis muy rico, más cuando comenzó a masturbarme mientras me cogía, hecho por le cual me vine en forma inmediata.
Entonces me recostó en la cama y me dijo que quería cogerme con mis piernas en sus hombros y asi lo hizo. Me hacía gemir en cada movimiento mientras me veía en el espejo del techo. Así estuvo un rato hasta que se vino, una sensación la cual me hizo sentir muy satisfecha y realizada.
Estuvimos descansando un rato, mientras platicábamos y nos besábamos, entonces me senté sobre él y comencé a jugar con su pene y mi culo hasta lograr otra erección, yo quería cabalagar, pero a él le gustaba cogerme patitas al hombro y así lo hicimos de nueva cuenta hasta que se vino por segunda vez.
Él se metió a bañarse y después de besarnos muy apasionadamente nos despedimos con la promesa de volver a tener otro encuentro. Pero eso ya es otra historia
Después de un breve intercambio de mensajes, acordamos finalmente conocernos y quedamos de vernos en un hotel de la ciudad de México. Yo llegué en forma anticipada a la cita para bañarme, terminar de depilarme y maquillarme para tan especial ocasión. Me puse un bra negro, bikini semitransparente también negro y medias con banda de silicón color negro, como complemento una falda corta entallada color chedrón y una blusa con brillos en varios colores. Desde luego no podían faltar un rico perfume y mis uñas.
Recibí una llamada donde me decía que lo esperara pues estaba un poco retrasado, en fin, me llama pafra preguntar el número de cuarto y le esperé, estaba algo nerviosa. Finalmte cuando tocó y le abrí, fue una sorpresa agradable para ambos.
Les diré que él no era precisamente un galán de cine, pero si muy varonil. Me abrazó y comenzó a besarme muy rico, mientras sus manos acariciaban mis nalgas y mmis piernas. Estando pegada a él sentía como su pene iba creciendo con la excitación.
Con tan ricos besos, el desabroché el cinto para liberar ese suculunto manjar, el cual comencé a mamar, sentía el calor de su pene y su dureza, aumentando con ello una exitación muy grande deseando ser poseida.
Me levantó la falda y me quitó el bikini, se puso detrás de mi tallando du pene entre mis nalgas, la verdad eso me calentó mucho, más adelante, le puse el condón y lubriqué muy bien mi culo. Él me puso en cuatro a la orilla de la cama y me penetró en una forma muy deliciosa y delicada, ya estando toda adentro comenzó a moverse disfrutando de mi culito y poniéndome en un extasis muy rico, más cuando comenzó a masturbarme mientras me cogía, hecho por le cual me vine en forma inmediata.
Entonces me recostó en la cama y me dijo que quería cogerme con mis piernas en sus hombros y asi lo hizo. Me hacía gemir en cada movimiento mientras me veía en el espejo del techo. Así estuvo un rato hasta que se vino, una sensación la cual me hizo sentir muy satisfecha y realizada.
Estuvimos descansando un rato, mientras platicábamos y nos besábamos, entonces me senté sobre él y comencé a jugar con su pene y mi culo hasta lograr otra erección, yo quería cabalagar, pero a él le gustaba cogerme patitas al hombro y así lo hicimos de nueva cuenta hasta que se vino por segunda vez.
Él se metió a bañarse y después de besarnos muy apasionadamente nos despedimos con la promesa de volver a tener otro encuentro. Pero eso ya es otra historia
10 years ago
gracias jorge