UNA TARDE NOCHE CON LA ABUELA DE 77 AÑOS

Tener una vida sexual activa, es la maravilla mas linda que hay, por lo menos a mi entender. Días atrás, me encuentro por la tarde con mi amiga abuela de 77 años, con quien me llevo muy bien y me da mucho gusto estar. La note muy exaltada, y le pregunte que le estaba pasando y luego de preguntarme si tenia tiempo de escucharla, me contaría todo. Había concurrido al medico, me aclaro que no tiene nada, ese medico es un sexólogo, le dijo ella al medico, que se sentía muy excitada todos los día y que pese a la edad que tiene, se vive masturbando día por medio. Luego de comentarle otras cosas, el doctor la diagnostico como ninfómana y que si tenia relaciones sexuales seguidas, no es nada malo, lo podía hacer. Ella le comento también al medico que le agrada mucho ser fuertemente castigada, a eso el doctor le dijo, que si se sentía bien y cómoda, lo practicara. Mientras ella me contaba esto, yo aproveche para desabrocharle los dos botones de su blusa, que me permitían ver sus tetas, que no son nada pequeñas, ella me dijo que si yo lo deseaba, podíamos ir a su departamento y se entregaría a todo lo que yo le quisiera hacer. Acepte y nos fuimos juntos, cuando estábamos en su domicilio, lo primero que le dije es que se quedara descalza, me pidió que fuera muy duro con ella, que la castigara porque es lo que mas le gusta, me aclaro que todo eso lo hacia el esposo hoy fallecido con ella, la tome de los cabello y la lleve a la cama, la tire en la misma, le saque toda la ropa y la deje desnuda completamente, se puso en cuatro patas y le introduje el pene en la boca, que chupara sin parar, los dos estábamos desnudos, le di chirlos y cachetadas, porque yo le decía que lo estaba haciendo mal, cosa que no era verdad, mamaba como loca, sudaba y lloriqueaba y me pedía que la castigara mas fuerte. Hicimos un flor de 69, en donde ella no solo disfrutaba de mi pene y de mi ano, yo le introduje con muchas ganas mi lengua en su sexo y ano y después, le metí tres dedos en su culo con una mano y con la otra, la castigue con mucha fuerza en sus nalgas. Le pregunte si quería que la sodomizara mas, me dijo que si, la ate a la cama como ella quería y con una fusta la castigues sin miramiento alguno, en sus tetas, su sexo, su vientre, mientras mi pene estaba en su boca y hacia garganta profunda sin que la dejase respirar, se movía en la cama como una loca y me pedía mas castigo, que no me detuviera y que no le tuviese lastima. La puse con su culo bien parado, la estaquee en la cama y mientras preparaba la fusta para pegarle, ella me pidió tres cosas, la primera que derritiera vela, la segunda que le pusiera un tapón en el ano y la tercera que tomara una pequeña picana que tenia guardada en un cajón de la cómoda y se la aplicara sin descanso por todo el cuerpo. Además me dijo, que si yo lograba satisfacerla al máximo, el premio mas grande que tenia para mi, era que quería que le rompiera el culo sin que me pusiera lubricante en el pene, en pocas palabras que la penetrara en seco. Cumplí al extremo con todo lo que me pidió y estaba tremendamente dolorida, ya que me pidió que le retorciera con mucho sadismo los pezones y lo hice, sin titubear un solo minuto. Terminado con todo ese suplicio que le aplique a mi amiga, sola se puso en cuatro patas y la comencé a penetrar por el culo, tomándola de los cabellos con una mano y con la otra, además de castigarla por la cola con una chancleta, le retorcí con mucha fuerza los pezones y la veía llorar, hasta que mi calentura era tan grande que le introduje el pene en su boca y le acabe todo el semen, que sin duda era una cantidad muy grande, la vi como lo tragaba y me seguía mamando hasta que me dejo sin una sola de semen en mis testículos. Quedo en la cama, desnuda y castigada como ella quería, me dijo que deseaba tener sexo mucho mas seguido y mientras me decía eso, se había puesto de rodillas en la cama y se comenzó a oprimir sus tetas, hasta que vi como le salía la leche de las mismas, fui a la cocina y tome una copa, le dije que la llenara con ese manjar natural y cuando dejo de sacarse la leche, primero le di una cuantas cachetadas a su pedido y cuando comenzó a llorar, se tomo todo el contenido como si fuese agua. Terminamos esa tarde noche, con muchas mas ganas de continuar teniendo sexo desenfrenado y seguro que en pocos días, nos volveremos a reunir para vivir momentos como estos y otros mas duros, ella me pidió hacerlo con mas hombres o mujeres. Le di un beso y le dije que se preparara para la próxima, que al ser muchos mas, seria muy duro. Dijo que quedaba atenta a mis decisiones. Hasta la próxima.