MIS COMIENZOS EN EL AMBIENTE LIBERAL
Yo estaba estudiando en Madrid, tenia 18 años, y solía ir mucho a una casa de travestis que había en la calle de Santa Engracia. En aquellos momentos las crossdressers estaban de moda y atraían a muchos adolescentes que empezaban su vida sexual follando y siendo follados por trans. Allí tenia una amig@ venezolana que se llamaba Wanesa que era muy sensual y con buena verga. Yo entonces me limitaba a penetrarla y mamarla su pollita. Un dia llegue y estaba ocupada y entonces me pasaron a esperarla en su habitación. Después de ver todas las revistas porno que tenia observe que encima de una butaca tenia su ropa interior. Entonces sin pensarlo me empecé a vestir con ella. Las braguitas eran negras así como el panty y el sujetador. Cuando había terminado de vestirme con esa ropa interior mi polla estaba totalmente empalmada u notaba una excitación especial en mi cuerpo que nunca había experimentado. El roce de la ropa, especialmente de la braguita, hizo que enseguida empezase a eyacular. La manché las bragas y el panty y entonces entró ella a la habitación. Cuando me vio con las bragas totalmente empapadas se empezó a reir y a llamar a sus otras amigos que estaban en el salón. Como todas decían que estaba muy bien decidieron que lo mejor era maquillarme y ponerme una peluca.
A partir de esa fecha, siempre que iba a esa casa Wanesa me vestía de femina y me maquillaba. Con eso cogí gusto a usar ropa de fémina y magrearme con mi chic@ como dos bolleras. A Wanesa, la veía yo que también disfrutaba enseñándome los ademanes de la féminas y tratándome como una mas.
Incluso algunas veces que estaba en el salón con el resto de las chic@s y llegaban algunos clientes, estos se empeñaban en que querían estar conmigo junto a Wanesa. Al final terminé haciendo trabajos extras en la casa de Wanesa y cogiéndole gusto a mamar pollas y sufrir penetraciones en mi culito virgen. Terminé convirtiéndome en una chic@ de la casa de putas. Allí aprendí todas las practicas sexuales que se podían hacer entre las CDs y los chicos e incluso con las chicas biológicas, ya que alguna también iba por la casa. Al cabo de unos meses era ya una CD experimentada en las artes puteriles y con mis 19 años era una de las mas jóvenes del lugar, muy solicitada por la clientela de todos los sexos
Las practicas BDSM me las enseño Wanessa. A principio era meterme dildos por el culito, llenarme de cera todo el pubis y el propio ojete. Luego vinieron los castigos en los pezones estirándoles y poniendoles pinzas, e incluso colocándoles agujas alguna vez. Ya me colocaba en una cruz de San Andrés y me castigaba los huevos y polla atándolos y pegandolos con una palmeta. Siguieron con los latigazos y palmetazos que dejaban las nalgas primero coloradas y luego con cardenales que indicaban donde habían caido los latigazos
Wanesa consiguió que el dolor que experimentaba cuando comenzaban los castigos se transformase en un placer divino, que pedía constantemente mas latigazos, mas retorcido de pezones, mas palmadas en las nalgas, mas penetraciones anales con dildos cada vez mas largos y gruesos. Al final Wanesa se convirtió en mi primer Ama y yo en su ayudante para todo
Así estuve hasta que un día Wanesa se marchó a su país, reclamada por su familia y entonces yo que ya me atraía todo lo del travestismo y lo del sadomasoquismo pase a frecuentar varias saunas y enrollarme con chicos, y chic@s. Además note que mi faceta sexual era totalmente en aquellos momentos homosexual. Me gustaban los hombres y las mujeres solo las toleraba como Amas recibiendo castigos de ellas.
Mi afición a la vida fácil con buenísimos resultados económico me hizo que abandonase los estudios y me dedicase a la prostitución de lujo, primero en saunas y luego en pisos de travestis y chicas bio. La juventud hacia que triunfase y fuese la preferida por los distintos burdeles que pase en los primeros años de mi vida de puta
Desde estas fechas hasta ahora han pasado muchos años. He seguido con mi afición a vestirme de fémina y practicar el sado y he tenido varios amantes y Amos y Amas que han considerado mi faceta de mujer. Creo que soy una mujer en cuerpo de hombre.
Después de estar en varios burdeles y clubes de bastantes provincias de España, al final he vuelto otra vez a Madrid. Ahora desde hace 5 años vivo con mi novio. El trabaja supliendo a un compañero en Barcelona y vuelve a Madrid los fines de semana, por lo que durante ésta estoy sola en casa. Mi novio es el que normalmente trae el dinero a casa mientras yo me dedico a las faenas de la casa.
Últimamente me han ofrecido trabajos extras en consideración con mi pasado en el ambientes puteril. Pero esto ya lo contare en próximos relatos
A partir de esa fecha, siempre que iba a esa casa Wanesa me vestía de femina y me maquillaba. Con eso cogí gusto a usar ropa de fémina y magrearme con mi chic@ como dos bolleras. A Wanesa, la veía yo que también disfrutaba enseñándome los ademanes de la féminas y tratándome como una mas.
Incluso algunas veces que estaba en el salón con el resto de las chic@s y llegaban algunos clientes, estos se empeñaban en que querían estar conmigo junto a Wanesa. Al final terminé haciendo trabajos extras en la casa de Wanesa y cogiéndole gusto a mamar pollas y sufrir penetraciones en mi culito virgen. Terminé convirtiéndome en una chic@ de la casa de putas. Allí aprendí todas las practicas sexuales que se podían hacer entre las CDs y los chicos e incluso con las chicas biológicas, ya que alguna también iba por la casa. Al cabo de unos meses era ya una CD experimentada en las artes puteriles y con mis 19 años era una de las mas jóvenes del lugar, muy solicitada por la clientela de todos los sexos
Las practicas BDSM me las enseño Wanessa. A principio era meterme dildos por el culito, llenarme de cera todo el pubis y el propio ojete. Luego vinieron los castigos en los pezones estirándoles y poniendoles pinzas, e incluso colocándoles agujas alguna vez. Ya me colocaba en una cruz de San Andrés y me castigaba los huevos y polla atándolos y pegandolos con una palmeta. Siguieron con los latigazos y palmetazos que dejaban las nalgas primero coloradas y luego con cardenales que indicaban donde habían caido los latigazos
Wanesa consiguió que el dolor que experimentaba cuando comenzaban los castigos se transformase en un placer divino, que pedía constantemente mas latigazos, mas retorcido de pezones, mas palmadas en las nalgas, mas penetraciones anales con dildos cada vez mas largos y gruesos. Al final Wanesa se convirtió en mi primer Ama y yo en su ayudante para todo
Así estuve hasta que un día Wanesa se marchó a su país, reclamada por su familia y entonces yo que ya me atraía todo lo del travestismo y lo del sadomasoquismo pase a frecuentar varias saunas y enrollarme con chicos, y chic@s. Además note que mi faceta sexual era totalmente en aquellos momentos homosexual. Me gustaban los hombres y las mujeres solo las toleraba como Amas recibiendo castigos de ellas.
Mi afición a la vida fácil con buenísimos resultados económico me hizo que abandonase los estudios y me dedicase a la prostitución de lujo, primero en saunas y luego en pisos de travestis y chicas bio. La juventud hacia que triunfase y fuese la preferida por los distintos burdeles que pase en los primeros años de mi vida de puta
Desde estas fechas hasta ahora han pasado muchos años. He seguido con mi afición a vestirme de fémina y practicar el sado y he tenido varios amantes y Amos y Amas que han considerado mi faceta de mujer. Creo que soy una mujer en cuerpo de hombre.
Después de estar en varios burdeles y clubes de bastantes provincias de España, al final he vuelto otra vez a Madrid. Ahora desde hace 5 años vivo con mi novio. El trabaja supliendo a un compañero en Barcelona y vuelve a Madrid los fines de semana, por lo que durante ésta estoy sola en casa. Mi novio es el que normalmente trae el dinero a casa mientras yo me dedico a las faenas de la casa.
Últimamente me han ofrecido trabajos extras en consideración con mi pasado en el ambientes puteril. Pero esto ya lo contare en próximos relatos
3 tahun lalu