EN EL TRANVIA
Todos los días subo al tranvía para ir a trabajar por la mañana y volver por la tarde-noche, siempre solemos encontrarnos las mismas personas, las mismas caras, una de ellas en particular me atrae mucho, es inevitable somos humanos, es una chica normal, como cualquiera de las que te puedas encontrar todos los días, pero me parece guapísima, y no evitaré decir que despierta en mí instintos que tengo algo apagados últimamente, he de confesar, que he pensado en ella alguna vez que me he aliviado solo. Como todos los días, yo subí al tranvía, era una mañana de verano, y ahí estaba ella sentada , preciosa, con un vestido, que le quedaba realmente bien, yo me puse de pié enfrente de ella, saqué mi móvil y me puse a leer las noticias, así en algún momento podría apartar la vista de la lectura y verla a ella, realmente me excitaba verla, pero obviamente, no lo demostraba… hasta ese día. En un momento en el que yo aparté la mirada de la pantalla, me fijé que estaba mirando mi entrepierna, suelo llevar vaqueros y, porque no decirlo, me quedan bien, estos en particular quedaban justos, cuando me di cuenta de lo que pasaba, también me fijé que no solo no dejaba de ver lo que ella tenía delante, sino que me miró justo después a los ojos, esa mirada, ufff, fue una mirada de deseo, sentí la electricidad cruzando mi cuerpo y un calor en mis pantalones que hizo que mi sexo creciera del todo, ella, os aseguro que se dio cuenta, mi corazón iba a mil por hora, y tenía la adrenalina a tope, sentí pálpitos en mi sien, y ella me seguía mirando con una sonrisa sin dientes, sabía que yo estaba nervioso, y le divertía seguro. En ese momento ella se levantó, seguía mirándome, y con un - Hasta luego , salió por la puerta del tranvía.
Aquello había sido surrealista, aún con la excitación bajé del tranvía dos paradas después, aquel había sido un principio de día genial .
Salía de trabajar sobre las 20:00, lo único que tenía en mente, es, que ella subiera en el mismo tranvía que yo, algo improbable , pero cosa que pasó dos paradas después, el vehículo estaba lleno a medias, todos los asientos ocupados, pero se podía andar perfectamente por el, ella me vio, y agarrándose por los diversos barrotes del tranvía llegó hasta mí, no pronunció una sola palabra , solo me miraba, pasaron dos paradas mas, yo también la miraba a ella, sin duda había atracción física por parte de los dos, por fin, hablé yo.
_ Hola, soy Alex. Me presenté.
-Hola, yo me llamo Sonia. Se acercó para darme dos besos ,me agarró de la cintura y me dio dos besos justo en las comisuras de los labios, tuvo que notar mi sexo cuando se acercó, porque yo la noté a ella, y lo mejor de todo es que aún tardó en despegarse, ella ya había visto mi anillo pero me preguntó por el, - ¿estas casado? .A lo que respondí afirmativamente, ella también lo estaba, también le había visto el anillo pero no le pregunté, di por hecho que estaba jugando conmigo, y yo me dejaba. Ella me dijo
-Ultimamente estamos siendo compañeros de viaje. Y con cara picara
- ¿Sabes? me gusta encontrarme contigo . En ese momento llegó mi parada, yo estaba super excitado pero tenía que bajar ella me dijo. -Espero encontrarte mañana, sube al tranvía de las 10:30.
-Te aseguro que eso haré le dije. y le di dos besos sujetándole con mi mano la cintura.
El tranvía de las 10:30, entré en el, y después de otear dentro del tranvía, ahí estaba ella, estaba deslumbrante, con un vestido provocador, muy provocador, vislumbraba que no llevaba nada debajo, no se veía, pero se adivinaba, si no hubiera habido nadie en ese tranvía, habría subido su pierna izquierda mientras mi sexo entraba en ella, erecto, firme y decidido a hacerla disfrutar. el tranvía estaba bastante lleno así que fuimos de pie los dos, aun así, me puse detrás de ella.
-¿Que tal Sonia?, estás preciosa, ¿Te puedo hacer una pregunta?.
-Claro. Respondió ella.
-¿Llevas algo debajo del vestido?. Ella me miró, sonriendo, se acercó a mi totalmente y me dijo,
-Tendrás que descubrirlo tu.
Yo la agarraba de la cintura cuando la mano de ella bajó hasta mi entrepierna, acarició mi sexo con el pantalón puesto , le daba igual quien estuviera en el tranvía , y sinceramente, a mi también. Era el momento de bajar del tranvía, me esperaba un día de trabajo duro, quedamos en subir los dos al tranvía de las 20:30
Las 20:30, yo subiendo al tranvía con puntualidad británica, y dos paradas mas adelante, ella, nos juntamos en la zona media, a estas horas ya no hay mucha gente, nos besamos por primera vez en los labios, los saboreo, me encantan sus labios, automáticamente, mi sexo crece como nunca y ella lo siente, seguimos besándonos, la gente pasa bastante de nosotros, mejor… así puedo descubrir si realmente está desnuda debajo de ese vestido, una de mis manos la tengo en la cintura de Sonia, la otra, la otra sube por su entrepierna lentamente, quiero que sienta mi mano acercarse a su sexo, lo toco, está realmente húmedo, ufff eso aún me pone mas ,busco su clitoris, escucho un gemido, mmm, es música para mis oídos, sus pezones están totalmente duros, se notan debajo de su vestido, llego a mi parada, me la paso, le beso el cuello, los labios, la abrazo, llegamos casi hasta el final de la linea, me dice
- ¿Te apetece subir?.
- Creía que no me lo pedirías nunca.
Parecemos unos adolescentes en celo, en el ascensor ella se muestra tal y como es, totalmente salvaje, hambrienta de sexo, como yo, mientras subimos en el ascensor, subo una de sus piernas, me encanta que esté abierta para mi, es mi sueño hecho realidad, empiezo a saborearla, adoro pasar mi lengua por su sexo, mmm está delicioso, llegamos a su piso y en cuanto entramos, en cuanto cerramos la puerta de casa, me quita el cinturón y me baja los pantalones .
- Dame eso que he estado esperando. Saca mi sexo, lo agarra firmemente, y empieza a masturbarme, ufff he deseado esto tantas veces, pasa su lengua por el, y lo mete en su boca, es maravilloso, yo acaricio su cabeza, que se mueve al compas de la felación, la levanto, le doy la vuelta, aun sin quitarle el vestido, levanto su pierna derecha,y dejo que ella sola lleve mi sexo, para penetrarse con el, mmm es maravilloso sentir el calor y la humedad, uffff primero voy despacito, mi cintura va acompasandose con la suya, quiero que sienta como la penetro, cada vez mas…. y mas….ella no para de gemir…como ya dije antes, es musica para mis oidos, que quieren que gima mas deprisa, empiezo a subir el ritmo, y la fuerza, empiezo a empotrarla, y ella pidiendome mas, mientras nos follamos, tengo su pecho en mi mano, adoro esos pezones, eso hace que aun esté mas firme y erecto.
-Sonia, quiero hacerte disfrutar como nunca.
Y le cuento mi secreto, mientras, paro, y le meto mi polla hasta donde no se puede mas. bien adentro, y bien dura.
- Alguna vez, me he masturbado pensando en ti, pero esto, lo supera por mucho.
La reacción de Sonia es estremecerse siento como su vagina se contrae, no para de gemir…..ella es mía
Yo estoy a punto, las contracciones de su sexo, hacen que yo no aguante mucho mas, termino corriendome , y mientras, la beso, le beso todo el cuerpo sudoroso, hacia mucho que no tenia tan buen sexo.
Le digo
- Este tiene que ser nuestro secreto…
- Lo sé, Alex, pero ya que va a ser nuestro secreto, podríamos tener alguno mas. sonriéndome.
Desde entonces seguimos, acumulando secretos los dos, y deseandonos en el tranvía
Aquello había sido surrealista, aún con la excitación bajé del tranvía dos paradas después, aquel había sido un principio de día genial .
Salía de trabajar sobre las 20:00, lo único que tenía en mente, es, que ella subiera en el mismo tranvía que yo, algo improbable , pero cosa que pasó dos paradas después, el vehículo estaba lleno a medias, todos los asientos ocupados, pero se podía andar perfectamente por el, ella me vio, y agarrándose por los diversos barrotes del tranvía llegó hasta mí, no pronunció una sola palabra , solo me miraba, pasaron dos paradas mas, yo también la miraba a ella, sin duda había atracción física por parte de los dos, por fin, hablé yo.
_ Hola, soy Alex. Me presenté.
-Hola, yo me llamo Sonia. Se acercó para darme dos besos ,me agarró de la cintura y me dio dos besos justo en las comisuras de los labios, tuvo que notar mi sexo cuando se acercó, porque yo la noté a ella, y lo mejor de todo es que aún tardó en despegarse, ella ya había visto mi anillo pero me preguntó por el, - ¿estas casado? .A lo que respondí afirmativamente, ella también lo estaba, también le había visto el anillo pero no le pregunté, di por hecho que estaba jugando conmigo, y yo me dejaba. Ella me dijo
-Ultimamente estamos siendo compañeros de viaje. Y con cara picara
- ¿Sabes? me gusta encontrarme contigo . En ese momento llegó mi parada, yo estaba super excitado pero tenía que bajar ella me dijo. -Espero encontrarte mañana, sube al tranvía de las 10:30.
-Te aseguro que eso haré le dije. y le di dos besos sujetándole con mi mano la cintura.
El tranvía de las 10:30, entré en el, y después de otear dentro del tranvía, ahí estaba ella, estaba deslumbrante, con un vestido provocador, muy provocador, vislumbraba que no llevaba nada debajo, no se veía, pero se adivinaba, si no hubiera habido nadie en ese tranvía, habría subido su pierna izquierda mientras mi sexo entraba en ella, erecto, firme y decidido a hacerla disfrutar. el tranvía estaba bastante lleno así que fuimos de pie los dos, aun así, me puse detrás de ella.
-¿Que tal Sonia?, estás preciosa, ¿Te puedo hacer una pregunta?.
-Claro. Respondió ella.
-¿Llevas algo debajo del vestido?. Ella me miró, sonriendo, se acercó a mi totalmente y me dijo,
-Tendrás que descubrirlo tu.
Yo la agarraba de la cintura cuando la mano de ella bajó hasta mi entrepierna, acarició mi sexo con el pantalón puesto , le daba igual quien estuviera en el tranvía , y sinceramente, a mi también. Era el momento de bajar del tranvía, me esperaba un día de trabajo duro, quedamos en subir los dos al tranvía de las 20:30
Las 20:30, yo subiendo al tranvía con puntualidad británica, y dos paradas mas adelante, ella, nos juntamos en la zona media, a estas horas ya no hay mucha gente, nos besamos por primera vez en los labios, los saboreo, me encantan sus labios, automáticamente, mi sexo crece como nunca y ella lo siente, seguimos besándonos, la gente pasa bastante de nosotros, mejor… así puedo descubrir si realmente está desnuda debajo de ese vestido, una de mis manos la tengo en la cintura de Sonia, la otra, la otra sube por su entrepierna lentamente, quiero que sienta mi mano acercarse a su sexo, lo toco, está realmente húmedo, ufff eso aún me pone mas ,busco su clitoris, escucho un gemido, mmm, es música para mis oídos, sus pezones están totalmente duros, se notan debajo de su vestido, llego a mi parada, me la paso, le beso el cuello, los labios, la abrazo, llegamos casi hasta el final de la linea, me dice
- ¿Te apetece subir?.
- Creía que no me lo pedirías nunca.
Parecemos unos adolescentes en celo, en el ascensor ella se muestra tal y como es, totalmente salvaje, hambrienta de sexo, como yo, mientras subimos en el ascensor, subo una de sus piernas, me encanta que esté abierta para mi, es mi sueño hecho realidad, empiezo a saborearla, adoro pasar mi lengua por su sexo, mmm está delicioso, llegamos a su piso y en cuanto entramos, en cuanto cerramos la puerta de casa, me quita el cinturón y me baja los pantalones .
- Dame eso que he estado esperando. Saca mi sexo, lo agarra firmemente, y empieza a masturbarme, ufff he deseado esto tantas veces, pasa su lengua por el, y lo mete en su boca, es maravilloso, yo acaricio su cabeza, que se mueve al compas de la felación, la levanto, le doy la vuelta, aun sin quitarle el vestido, levanto su pierna derecha,y dejo que ella sola lleve mi sexo, para penetrarse con el, mmm es maravilloso sentir el calor y la humedad, uffff primero voy despacito, mi cintura va acompasandose con la suya, quiero que sienta como la penetro, cada vez mas…. y mas….ella no para de gemir…como ya dije antes, es musica para mis oidos, que quieren que gima mas deprisa, empiezo a subir el ritmo, y la fuerza, empiezo a empotrarla, y ella pidiendome mas, mientras nos follamos, tengo su pecho en mi mano, adoro esos pezones, eso hace que aun esté mas firme y erecto.
-Sonia, quiero hacerte disfrutar como nunca.
Y le cuento mi secreto, mientras, paro, y le meto mi polla hasta donde no se puede mas. bien adentro, y bien dura.
- Alguna vez, me he masturbado pensando en ti, pero esto, lo supera por mucho.
La reacción de Sonia es estremecerse siento como su vagina se contrae, no para de gemir…..ella es mía
Yo estoy a punto, las contracciones de su sexo, hacen que yo no aguante mucho mas, termino corriendome , y mientras, la beso, le beso todo el cuerpo sudoroso, hacia mucho que no tenia tan buen sexo.
Le digo
- Este tiene que ser nuestro secreto…
- Lo sé, Alex, pero ya que va a ser nuestro secreto, podríamos tener alguno mas. sonriéndome.
Desde entonces seguimos, acumulando secretos los dos, y deseandonos en el tranvía
6 years ago