El padre de mi barrio.

En Colombia llamamos "padre" al sacerdote. Vivo en Bogota en un barrio clase media donde hay una iglesia antigua donde hay un padre de quien se dicen muchas cosas, entre otras que abusa de las asistentes a misa y a confesión. Era Lunes festivo, salí de mi casa temprano a hacer unas compras y pasé por la iglesia y vi el aviso que habían confesiones y entre a la iglesia. Cuando fue mi turno, muy morbosamente, le confesé al padre mis debilidades orales, narrándole con detalle mis aventuras con desconocidos en los baños, en los videos porno y hasta con los conductores de taxi y Uber. Note como el padre se excitaba con mis historias, me puso mi penitencia y me pidió que volviera la semana entrante.

El domingo siguiente en misa, a la que deliberadamente asistí vestida algo sexy, se me acercó y me preguntó "como vas hija, te estas portando bien?" a lo que maliciosamente le respondí: "Mal padre... cada vez peor.." por lo que me llamo a confesión en la tarde de ese día. Me causó curiosidad que me recibió sin la tradicional sotana y con un pantalón un poco apretado donde se alcanzaba a notar levemente su bulto entre las piernas. Una de las cosas que confesé fue que cuando voy en el bus y se para a mi lado un hombre no puedo parar de mirarle su bulto e imaginar su pene en mi boca obligándome a tragarlo todo, a lamerle las bolas y sacarle toda su leche para tomármela. Note como el padre tuvo una erección durante la confesión y me insinuó que participara de una sanción de mi lujuria la cual el me haría con mucho gusto.

Llegue a mi sanción el miércoles siguiente y el padre me recibió en la casa cural, en su despacho que es una pequeña oficina en el segundo piso. "Para empezar la sanción de tu lujuria debemos sacarla a la luz, debemos hacer que aparezca para poder sacarla de tu cuerpo, eso requerirá de un sacrificio y de mucha disposición de tu parte" dijo el padre. "Hace lo que sea necesario padre estoy dispuesta solo dígame lo que hay que hacer" Le dije.

Estaba sentada en una pequeña butaca, me dijo que cerrara los ojos e imaginara uno de los momentos de lujiria, le dije que estaba en un bis y que un bello hombre se paraba a mi lado rozando con su pene mi hombro. De pronto empece a sentir que algo rozaba mi hombro, entre abrí los ojos y ella el padre frotando su pene en mi hombro. "continua hija" Imagino que saca su pene y me roza la cara con él... Casi me desmayo cuando escuche que bajaba su cremallera para después sentir su verga caliente y ya humeda en mi mejilla mientras decía: "continua hija deja salir tu lujuria" Sin hablar mucho mas me metí la verga del padre en la boca y empece a chuparla como loca, le baje del todo los pantalones para poder lamerle las bolas. Cada vez que le pasaba la lengua por las bolas se empinaba intentando que mi lengua llegara a su ano. Me detuve, lo mire a los ojos, con mis manos en su cintura lo voltee para que su culo quedara a mi alcance y empece a darle besitos en su nalgas acertándome con mi lengua a su ano mientras él se masturbaba rápidamente. Iba a hacerlo, iba a meter mi lengua en su ano, le abrí las nalgas para lamerle su provocativo culo y de pronto se volteo disparando chorros de semen algunos de ellos cayeron en mi ropa, mi pelo y mi cara.

Me alcanzo unos Kleenex para limpiarme mientras se subía su pantalón y me preguntaba si había salido la lujuria a lo que respondí "no padre pero casi.... casi lo logro" por lo cual me dijo que regresará el próximo domingo y lo volveríamos a intentar. Ese día es mañana, iré muy devota a mi segunda sanción mañana .
Published by Lucialara
7 years ago
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jxjjxj
jxjjxj 7 years ago
Que buena historia Asi eres en realidad
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jhssu06
jhssu06 7 years ago
Que buena historia puta chupa vergas.
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markomarini
una historia maravillosa
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